La playa de Jibacoa ofrece la increíble oportunidad de explorar los restos hundidos de un buque de carga. Hay también un buque de guerra llamado Esparta, a la espera de tu visita en las profundidades del mar. También en las proximidades de Puerto Escondido se encuentra el Peñón del Fraile, una pequeña playa de aguas tranquilas. Esta playa alberga magníficos paisajes marinos. Para una experiencia poco común, echa un vistazo a los pozos de petróleo, que han contribuido enormemente a la riqueza de la zona, impulsando su economía. Es fundamental visitar además la ciudad de La Habana, el centro económico, político y cultural de Cuba, una urbe enormemente rica en historia y en arquitectura española. La Habana es bien conocida por su clima cálido y húmedo, atemperado por los vientos alisios del océano. Esta ciudad portuaria de extrema importancia es bien conocida por su ron y, por supuesto, sus cigarros. Las fortalezas tales como el Castillo del Morro, todavía se ciernen sobre las partes más antiguas de la ciudad, con sus numerosas iglesias, edificios coloniales y calles estrechas. La parte moderna de la ciudad contrasta con las zonas más antiguas, que cuentan con amplias avenidas, casas inmensas y espléndidas y majestuosos edificios públicos.
Puerto Escondido es una playa tranquila, perfectamente situada, puede servir como excelente punto de partida para la aventura cubana. Además tiene modernas comodidades y hoteles fantásticos para elegir.
Puerto Escondido cuenta con numerosas maravillas que ofrecer, el simple hecho de sentarse, tomar un cóctel y disfrutar de la brisa del océano se convierte en una experiencia única.